Apple Music, al celebrar su décimo aniversario, ha lanzado un ambicioso y creativo proyecto: la construcción de un estudio de grabación de 15,000 pies cuadrados en Los Ángeles, que se espera inaugurar este verano. Esta instalación de alta gama demuestra el profundo compromiso de Apple con los artistas y la creatividad, reinventando así la forma en que se crea y comparte la música.
Este estudio de grabación ubicado en Los Ángeles no solo es un espacio tradicional de grabación, sino que es un ecosistema creativo integral diseñado específicamente para la industria musical moderna. Cuenta con dos estudios de grabación avanzados, equipados con un sistema de reproducción de audio espacial, que se adapta con flexibilidad a diversas necesidades como entrevistas en vivo, conversaciones relajadas y actuaciones improvisadas. Además, las instalaciones incluyen un enorme estudio de 4,000 pies cuadrados, que proporciona una plataforma para actuaciones en vivo, grabaciones multicámara, interacción con los fans y funciones de proyección, creando infinitas posibilidades de interacción entre artistas y audiencia. También se incluye un espacio de mezcla de audio espacial exclusivo, equipado con un sistema de altavoces PMC 9.2.4, que garantiza una experiencia de producción con calidad de sonido de primera. Además, cuenta con un laboratorio de fotografía y redes sociales, una sala de edición y cabinas insonorizadas para la creación de canciones y la grabación de podcasts.
La co-directora de Apple Music, Rachel Newman, ha comentado que la visión de este nuevo estudio de grabación es crear un espacio donde los artistas puedan componer, conectar y compartir. Esta instalación, situada en el corazón de Los Ángeles, se convertirá en la sede insignia de la red creativa global de Apple Music, complementando a las ya existentes en Nueva York, Tokio, Berlín, París y Nashville, con planes de expansión a otras ciudades en el futuro. Esta iniciativa no solo refuerza la posición de Apple Music en un competitivo mercado de streaming, sino que también establece un nuevo estándar sobre cómo las empresas tecnológicas pueden respaldar la infraestructura creativa de la industria musical.



