Amazon ha lanzado recientemente su robot Vulcan, que utiliza tecnología de sensibilidad avanzada y puede colocar o retirar productos con la misma flexibilidad que un ser humano. Esta innovación revoluciona el concepto de diseño de los robots industriales tradicionales Evitar el contacto, trayendo cambios revolucionarios a la industria de almacenamiento automatizado.
En el seminario de Entregando el Futuro en Dortmund, Alemania, Amazon anunció que el robot Vulcan ha completado las pruebas piloto y está listo para entrar en la fase de prueba Beta. El programa piloto inicial desplegó seis robots Vulcan Stow en un centro logístico en el estado de Washington, y la prueba Beta aumentará a treinta unidades, seguida de un despliegue a mayor escala en Alemania, donde Vulcan Stow y Vulcan Pick realizarán operaciones colaborativas.
La mayor innovación del robot Vulcan radica en su equipo de herramientas de extremo que cuenta con sensores de fuerza y torque en seis ejes, capaces de medir la fuerza de contacto en todas las direcciones, lo que lo diferencia radicalmente de los brazos robóticos utilizados actualmente en los centros logísticos de Amazon. Los robots tradicionales solo pueden tomar objetos de cintas transportadoras o cajas abiertas, y deben evitar el contacto con otros elementos.
Los expertos en ciencia aplicada de Amazon Robotics explican que la automatización industrial tradicional ha estado diseñada desde los años 90 para prevenir el contacto, haciendo que los robots dependan únicamente de la visión y la información de sus articulaciones. Lo que hace único a Vulcan es la combinación del tacto y la visión, lo que mejora la flexibilidad operativa de los robots.
Tomando como ejemplo Recoger una moneda, el robot Vulcan ha simulado el sentido del tacto humano: primero toca la superficie y luego se desliza sobre ella para localizar el objeto objetivo, que es precisamente el núcleo de su tecnología.
El diseño del estante de almacenamiento para telas gestionado por los robots Vulcan se divide en pequeños compartimentos, donde los artículos se colocan de manera aleatoria y se fijan con bandas elásticas, lo que hace que sea casi imposible tomar o colocar objetos sin tocar otros. Ambos modelos de robots están equipados con un segundo brazo, diseñado específicamente para manejar las bandas elásticas.
El sistema Vulcan Stow crea modelos 3D precisos de estantes y contenido a través de tres pares de cámaras tridimensionales, utilizando múltiples modelos de aprendizaje profundo para la segmentación de imágenes, logrando una gestión flexible de los objetos. El equipo entrena algoritmos de imagen mediante simulaciones generadas por IA para superar el impacto de las bandas elásticas en la imagen.
En el proceso de recogida, el sistema primero evalúa la viabilidad de acceder al objeto objetivo; si hay demasiados objetos obstruyendo el camino, se requerirá intervención manual. Los robots Vulcan utilizan tecnología de luz estructurada para medir la profundidad y aplican un modelo de red neuronal mejorado para clasificar los objetos, lo que les permite identificar el objeto objetivo sin necesidad de escanear códigos de barras.
Esta innovación representa un cambio paradigmático en la operación de robots, pasando de moverse únicamente en espacios libres a poder manejar eficientemente diversos tipos de objetos, incluyendo la búsqueda de artículos en espacios reducidos. Los robots Vulcan se especializan en manejar las capas superior e inferior de las estanterías de almacenamiento, mientras que los empleados humanos se encargan de la capa intermedia y del tratamiento de objetos especiales. Este modelo de colaboración no solo mejora la eficiencia, sino que también disminuye el riesgo de seguridad para los empleados.
Con el continuo crecimiento de la demanda de comercio electrónico, esta tecnología innovadora ayudará a Amazon y a otras empresas de logística a enfrentar el aumento constante en la demanda de pedidos y a mantener la eficiencia y la precisión. En un centro logístico como Hong Kong, la aplicación de este tipo de tecnología reforzará aún más la competitividad.



