Según Informe sobre Tecnología Avanzada de Suiza 2025, la proporción de inversión de capital de riesgo en el ámbito de la tecnología profunda en Suiza ha superado a cualquier otro país del mundo, lo que demuestra su potencial en innovación tecnológica. El informe señala que, durante el período de 2019 a 2025, aproximadamente el 60% de la inversión de capital de riesgo en Suiza se dirigirá a la tecnología profunda, una proporción que supera con creces a la de otros países. El valor del ecosistema de tecnología profunda en el país ha superado los 100 mil millones de dólares, y el total de financiamiento para startups alcanzó los 1.9 mil millones de dólares el año pasado, con la expectativa de que aumente a 2.3 mil millones de dólares para 2025.
La tecnología profunda (Deep tech) implica técnicas basadas en innovaciones significativas en ciencia o ingeniería, abarcando áreas como la inteligencia artificial, la computación cuántica, materiales avanzados, biotecnología, robótica y energía limpia. Estas tecnologías suelen requerir largos ciclos de investigación y desarrollo, así como una inversión de capital considerable.
Este informe ha sido elaborado por la Fundación Deep Tech Nation Switzerland, una organización sin fines de lucro que cuenta con el apoyo de la empresa de telecomunicaciones Swisscom y el gigante bancario UBS, con el objetivo de impulsar el desarrollo de la innovación en Suiza. El informe se publica en colaboración con la plataforma de datos de startups Dealroom.co y Startupticker. Tras analizar más de 1500 startups, se ha encontrado que las empresas de tecnología profunda han creado un valor empresarial consolidado que supera los 100 mil millones de dólares.
Además, el Instituto Federal de Tecnología de Zúrich (ETH Zurich) y la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) están clasificados como las cuatro principales universidades de Europa en la formación de empresas derivadas de tecnología profunda, solo detrás de Oxford y Cambridge. Alex Stöckl, socio fundador de la firma de capital riesgo Founderful, señala que Suiza destaca en investigación básica, pero en la próxima década, serán los científicos e ingenieros quienes liderarán el proceso de transformación de sus hallazgos en empresas globales.
En la actualidad, las startups de IA y aprendizaje automático son las principales beneficiarias de la inversión en tecnología profunda en Suiza. Se estima que en 2024, casi un tercio del capital destinado a tecnologías profundas irá dirigido a startups que priorizan el desarrollo de IA, un aumento de tres veces en comparación con 2020. La inversión abarca múltiples áreas, desde software para robots humanoides hasta algoritmos para la clasificación de chocolate. Al mismo tiempo, los sectores tradicionales de Suiza, como la robótica, la tecnología climática y la biotecnología, también continúan creciendo gracias a las grandes rondas de financiamiento de empresas como Neustark, Neo Medical y Transmutex.
El informe señala una brecha notable: casi el 96% de la inversión en etapas avanzadas proviene de fondos globales en lugar de locales, lo que indica que Suiza aún tiene oportunidades para desarrollar su capacidad de inversión local. Stöckl ha evaluado el ecosistema tecnológico suizo como fuente de energía, y está asumiendo su lugar en el escenario global. Los datos muestran que, además de la inversión en tecnologías profundas, Suiza posee el número más alto de unicornios per cápita en Europa, manteniéndose en la primera posición del índice global de innovación durante 13 años consecutivos.



