En el último partido de la Premier League, el Manchester City se enfrentó al Brighton y volvió a sufrir una derrota, lo que ya suma dos pérdidas en esta nueva temporada. En este encuentro, la alineación del City contó con tres delanteros: Bobb, Marmoush y Haaland. En el medio campo estaban Reijnders, B. Silva y Rodri, mientras que los laterales defensivos eran Ait-Nouri y Nunes.
Al inicio del partido, el Manchester City mostró una actitud ofensiva muy activa, mientras que el Brighton se vio relativamente pasivo en la primera mitad, sin poder organizar efectivamente los contraataques. Haaland tuvo varias oportunidades de disparo durante los contraataques, pero la defensa del Brighton lo presionó fuertemente, haciendo difícil encontrar buenos ángulos para el tiro. En el minuto 24, un centro de Ait-Nouri le creó a Haaland una oportunidad de cabezazo dentro del área, sin embargo, debido a que su técnica de cabezazo fue un poco deficiente, no logró concretar un tiro efectivo.
Bobb ha mostrado un estado activo desde los inicios de la competición, y tras recuperarse de las lesiones de la temporada pasada, ha vuelto a liberar su potencial en la Premier League. Su rendimiento estable en el juego ha añadido brillo al ataque del Manchester City, especialmente en su combinación con Haaland, cuya conexión ha generado una gran cantidad de amenazas.
En el minuto 34, Bobb llevó el balón por la derecha y, al cortar hacia adentro, se lo pasó a Marmoush. Aunque Marmoush se enfrentaba a la presión de varios jugadores del Brighton, no se rindió y finalmente le cedió el balón a Haaland, quien, en el instante en que el portero se acercaba, tocó el balón con sutileza para enviarlo a la esquina inferior derecha de la portería, demostrando su asombrosa precisión ofensiva y agilidad.
En la primera parte, el Manchester City dominó el partido, sin dar muchas oportunidades al Brighton. Sin embargo, al comenzar la segunda mitad, el City optó por reducir el ritmo del juego, esforzándose por encontrar ocasiones de contraataque ante el ataque del Brighton. A pesar de que Bobb tuvo una buena oportunidad de gol fuera del área, el Brighton realizó un cambio masivo de jugadores en el minuto 60, ajustando su formación para potenciar su ofensiva en el frente.
Esta transformación permitió que el Brighton lanzara un contraataque rápido, y el desborde de Mitoma dejó a la defensa del Manchester City completamente descompuesta. Luego, una asistencia directa encontró a Minteh, quien logró disparar a puerta; solo la intervención del joven portero Trafford evitó la crisis de gol.
En el minuto 64, el Brighton generó una amenaza a través de un tiro libre en la parte delantera; el remate acrobático de Dunk fue penalizado como un tiro penal debido a la interferencia de Nunes. Milner no dudó y lo convirtió, empatando el partido. A partir de ahí, el Brighton se llenó de energía; Minteh disparó en el minuto 70, pero se fue ligeramente desviado. En ese momento, la defensa del mediocampo del Manchester City parecía vulnerable, lo que permitió al Brighton lanzar sus ataques con facilidad durante la transición entre defensa y ataque.
Frente a la creciente presión, el Manchester City solo pudo dar entrada a Doku y OReilly, con la esperanza de fortalecer su ataque. Sin embargo, el Brighton realizó ajustes tácticos con serenidad, consolidando su defensa mientras buscaban oportunidades para el contraataque, lo que obstaculizó el ataque del City y presentó un desafío defensivo cada vez más severo.



