El Manchester United se enfrentó al Burnley en la Premier League esta temporada utilizando una formación 3-4-2-1, y logró vencer a su oponente, a pesar de enfrentar varios desafíos durante el partido. En medio de una racha poco favorable, el nuevo entrenador del Manchester United, Amorrin, se encuentra bajo la presión de la directiva del club, necessitando urgentemente esta victoria para asegurarse su puesto.
Desde el inicio del partido, el Manchester United mostró una intensa intención de atacar, mientras que el medio campo del Burnley apenas podía detener el rápido juego de pases y ofensivas de los de Manchester. Mbeumo tuvo dos oportunidades en el área muy temprano, pero perdió la chance de anotar debido a la presión de los defensores. Al mismo tiempo, Casemiro también generó peligro durante un córner, aunque su cabezazo fue despejado por el portero rival. A medida que avanzaba el partido, el Manchester United fue tomando el control, y la velocidad y agilidad de sus extremos se convirtieron en una gran ventaja para el equipo.
La competición avanzaba hasta el minuto 15 cuando el exjugador del Manchester City, Walker, tuvo un intenso choque con Mount por la banda derecha, lo que casi provoca un penalti. Sin embargo, tras revisión del VAR, el árbitro determinó que la acción de Walker no constituyó falta. A medida que el partido avanzaba, el medio campo del Manchester United parecía tener dificultades, ya que la posición de B Fernández estaba demasiado retrasada, sumado a la ausencia de Mount, lo que afectó la coordinación en la delantera.
Cuando llegó el primer gol, Dalot rompió por la banda, lo que provocó una falta de Walker y le dio a Manchester United una valiosa oportunidad de tiro libre. El pase de B. Fernandes asistió a Casemiro, quien anotó un autogol inesperado, dando así ventaja a Manchester United. Luego se reanudó el partido, pero Burnley, al ir perdiendo, intensificó su ataque, lo que hizo que la defensa de Manchester United tuviera algunas fallas.
Con el inicio de la segunda mitad, el Manchester United realizó ajustes en su plantilla, pero lo que llegó después fue el empate rápido del Burnley. La confusión en la defensa permitió a Foster anotar con facilidad, poniendo al descubierto los problemas defensivos del United. Al mismo tiempo, Dalot continuó intentando avanzar, tomando el control del juego, y posteriormente volvió a generar oportunidades de ataque.
Aunque el Manchester United creó varias oportunidades de peligro después, no logró convertirlas en goles. Por su parte, el Burnley implementó gradualmente una estrategia defensiva sólida, lo que llevó al ataque del Manchester United a un estancamiento. Al final del partido, la activación del VAR generó nuevamente controversia; finalmente, el Manchester United recibió una oportunidad de penalti, una decisión que originalmente no fue sancionada, pero que el árbitro cambió tras la revisión, brindándole al Manchester United la posibilidad de revertir el resultado.



