En la nueva temporada de la Major League Baseball, el lanzador de los Milwaukee Brewers, Trevor Megill, sufrió una dura derrota durante el fin de semana inaugural frente a los New York Yankees, lo que desató un acalorado debate sobre el uso del ‘torpedo bat’. Esta innovación, que podría cambiar el destino de los bateadores, no resulta ser el arma revolucionaria que muchos imaginaban. De hecho, en esta etapa, los bateadores de la liga aún tienen margen para mejorar su desempeño. Actualmente, el promedio de bateo global de la MLB es de apenas .237, una cifra inferior a la registrada en el mismo período del año pasado, lo que refleja los grandes desafíos a los que se enfrentan los jugadores en el campo.
A medida que el stick de pez continúa ganando atención, otra tendencia clave está influyendo en el rumbo de la temporada: los lanzadores están prestando cada vez más atención a Esculpiendo el recorrido. Esta técnica pretende sustituir los lanzamientos tradicionales de curva mediante potentes lanzamientos con efectos más variados. Desde 2016 hasta 2024, se han registrado aproximadamente 20,802 curvas menos en la MLB, siendo reemplazadas por nuevos tipos de lanzamientos como la cutter, el sweeper y el slider, lo que refleja un cambio notable en las estrategias de los pitchers.
El diseño del bate ‘Torpedo’ desplaza ligeramente el punto dulce hacia la empuñadura, como si se tratara de un palo de golf ajustado con alta tecnología. Para ciertos bateadores, esto podría ser de ayuda, especialmente para aquellos con brazos más cortos o que suelen colocarse cerca del plato. Sin embargo, en comparación con el avance en el mercado de bates personalizados, su impacto real en el rendimiento general de los golpes parece ser menos evidente.
En la intensa competencia de esta temporada, jugadores como Anthony Volpe y Cody Bellinger lograron conectar un total de nueve jonrones en el partido contra los Brewers. Sin embargo, esto ha generado un debate sobre ética y técnica, difícil de resolver de manera categórica. De esos nueve jonrones, la mayoría de los jugadores se enfrentaron a rectas altas y de baja velocidad, lo que resultó en un notable aumento en la tasa de slugging. Pero, incluso con un bate explosivo, los bateadores aún se enfrentan a mayores desafíos. El incremento en la velocidad de los lanzamientos y en las variaciones de los efectos hace que batear sea cada vez más complicado.
A medida que los lanzadores diseñan nuevos lanzamientos en laboratorios, la combinación tradicional de recta y curva está desapareciendo cada vez más. Paul Skenes, en sus tres aperturas de esta temporada, solo ha lanzado cuatro curvas, destacando claramente esta tendencia cambiante.



